Todo inicio tiene su final, la actividad vuelve a tomar su curso normal, pero bien lo vale ya que disfrutamos de unas excelentes vacaciones y no pudimos elegir mejor destino, aunque para ser francos teniamos muy buenas opciones..., la intención era "Descansar" disfrutar de la naturaleza, de la diversidad de los deportes de aventura, los paseos por la selva a pie o a caballo, los diferentes deportes acuáticos y náuticos, pero sobre todo admirar y conocer la indescriptible riqueza cultural y arqueológica del Mundo Maya.
En las costas de la Riviera se localiza el Gran arrecife Maya ideal para la práctica del buceo, segundo por su extensión a nivel mundial. Así que sin dudarlo disfrutamos del espectáculo es la vida marina tropical, único e inolvidable!!
El Caribe Mexicano sin duda ha crecido aceleradamente en los últimos años. Nos dimos a la tarea de recorrer desde Cancún, hasta Carrillo Puerto, en el corazón de la reserva de la Biosfera de Sian Ka'an pasando por Playa del Secreto, Playa Paraíso, Punta Maroma, Punta Bete, Xcalacoco, Playa del Carmen, Xcaret, Calica, Paamul, Puerto Aventuras, Xpu Há, Kantenah, Akumal, Xel Há, Tulum, Cobá, Boca Paila y Punta Allen.
Disfrutamos de la vida natural, del contacto con las aguas tibias y transparentes.
Al atardecer, después de un día en la playa, disfrutamos desde una hamaca los colores de la puesta del sol o un masaje relajante en el jacuzzi o en la regadera que vierte agua de cenote cuyo piso estaba incrustado de piedras de río las cuales proveen un agradable masaje en la planta los pies jiji.
Degustamos exquisitas cenas a la luz mágica de las velas o bien saboreada a la orilla del mar, tuvimos la suerte que en donde nos hospedamos ofrecian creaciones exóticas que combinan la comida mediterránea, asiática y mexicana. Indudablemente, estos lugares basan su éxito en consentir los sentidos para lograr unas vacaciones simplemente inolvidables.
Por la noche tuvimos varias opciones, una de ellas fue el recorrido por toda la Quinta avenida la cual se viste de luces y se encuentra con todo tipo de lugares para bailar, cenar, tomar algún trago o escuchar música en vivo, realizar algunas compritas, todo en un ambiente cálido y lleno de matices.
Nos encontramos con diferentes grupos de jazz alternan con las grandes orquestas caribeñas, los ritmos tropicales con los bailes flamencos y no podía fallar la algarabía de los mariachis que está siempre flotando en el aire de la noche. Bailamos bajo el cielo estrellado y la magia de las extravagantes discotecas y shows de vanguardia.
Con un clima abrasador, colores intensos, la pureza del aire y la sensualidad de su ambiente, conquista a cualquiera.
Espero pronto tener un poco más de tiempo para detallar de cada una de las Zonas Arqueologicas que visitamos y el nado con delfines...